..Y TÚ A QUE RELIGIÓN PERTENECES…

Primeros vestigios de religiosidad


Hasta hace algunas décadas, los primeros homínidos conocidos por la paleontología eran el llamado "Sinántropo" ("homo pequinensis") y el "Pitecántropo" ("hombre de Java"). Ambos tipos de "homo sapiens" remontan al Pleistoceno Medio (alrededor de 500.000 años ha)1 y se extinguieron durante ese mismo período, debido a la glaciación. El descubrimiento del Sinántropo constituyó también el hallazgo de los vestigios del rito funerario más primitivo de que disponemos. Efectivamente, esos restos humanos habían sido enterrados de una forma ritual, después de extraer el cerebro de su cabeza, a través de un orificio practicado en la parte occipital del cráneo, para comérselo en un banquete ritual. La verificación de que ese era el significado del hoyo occipital encontrado en esos cráneos, fue hecha posteriormente por Hose y Mc Dougall, al constatar el mismo tipo de ritual practicado todavía por grupos tribales primitivos de la Isla de Borneo2. De estos hechos puede concluirse que el banquete "caníbal" habría sido "uno de los rasgos establecidos del culto a los muertos en el Pleistoceno Medio de la China norte"3. Esta misma práctica de extracción del cerebro está comprobada en épocas primitivas muy posteriores a la anterior, con los esqueletos del tipo Neandertal, correspondientes al Paleolítico Superior (unos 100.000 años atrás), descubiertos en el Mont Circé4. Descubrimientos parecidos fueron repitiéndose, de tal manera que pudo establecerse que ese tipo de ritual había constituído una práctica general entre los primitivos seres humanos. Tal acto caníbal iba acompañado, por lo que parece, de un culto primitivo especial dado a los cráneos de aquellos hombres de quienes se extraía el cerebro. ¿Pero cual es el significado de tan macabro rito? Al respecto, James señala lo siguiente: "Pareciera que el cerebro había sido extraído del cráneo y comido a fin de que pudieran ser transmitidos a los vivos los atributos mágico-religiosos de los muertos...El deseo de conservar los trofeos, como es el caso en el culto de los cráneos, parece haber sido inspirado por la idea de guardar una reliquia detentora de un poder especial; la extracción del cerebro y el acto de comerlo era una forma de comunión con el muerto, o un medio de compenetrarse de su fuerza y de sus virtudes".

En esta práctica, verificada a través de los diversos vestigios paleontológicos, puede ya verse implícita la existencia de una mentalidad de tipo mágico, aunque sea difícil determinarlo con certeza. Pero tal mentalidad se encuentra claramente presente en las formas primitivas de religiosidad que ha podido ser observada y descrita "en vivo", gracias a investigadores antropólogos, sobre todo a fins del siglo XIX yprincipios del siglo XX6.


jueves, 17 de junio de 2010

CRISTIANISMO


Cristianismo, religión monoteísta basada en las enseñanzas de Jesucristo según se recogen en los Evangelios, que ha marcado profundamente la cultura occidental y es actualmente la más extendida del mundo. Está ampliamente presente en todos los continentes del globo y la profesan más de 1.700 millones de personas.
El cristianismo, en muchos sentidos y como cualquier otro sistema de creencias y de valores, se comprende sólo desde “el interior” entre aquellos que comparten la creencia y se esfuerzan por vivir de acuerdo con esos valores. Cualquier descripción de la religión que ignorara estas concepciones internas, no sería fiel en el orden histórico. Sin embargo, un aspecto que los que profesan esta fe no reconocen por regla general es que semejante sistema de creencias y de valores también puede ser descrito de una forma que tenga sentido para un observador interesado, aunque no comparta, o no pueda compartir, su punto de vista.

Baal Shem Tov


Baal Shem Tov (1700-1760), místico hebreo y fundador del hasidismo, un movimiento espiritual dentro del judaísmo.
Nacido en la región de Podolia (hoy en Ucrania), le bautizaron como Israel ben Eliezer, pero se le llamó Baal Shem Tov, que significa maestro del Santo Nombre, ya que afirmaba realizar milagros en el nombre de Dios; también se le conoce por el acrónimo Besht. Rabino y estudioso de la Cábala, predicaba la conversión interna, la devoción personal, la humildad, la caridad, la experiencia mística y extática de la divina presencia y una actitud jubilosa ante la vida, en lugar de las enseñanzas tradicionales y la doctrina rígida. Desde 1740 hasta su muerte vivió en Medzhibozh, Podolia, donde consiguió captar a un gran número de seguidores. Este grupo, que llegó a contar con unos 10.000 devotos en el momento de su muerte, dio origen al moderno hasidismo. En el transcurso de su vida, Baal Shem Tov fue protagonista de muchos relatos legendarios. Sus enseñanzas y las leyendas existentes en torno a su figura, que en un principio se conservaron por tradición oral, fueron quedando reflejadas por escrito a medida que se iba desarrollando el movimiento hasídico

EL SHABAT


El shabat
El calendario litúrgico judío sigue manteniendo la misma división del tiempo que se hace en la Torá, y que se observaba en el culto del templo. Cada siete días se celebra el shabat, día en el que no se realiza ningún trabajo. Este es un acto simbólico de abstención, por el que los judíos devuelven el mundo a su dueño, es decir, a Dios, reconociendo que todo lo que el hombre consigue con su trabajo es solo producto de la bondad divina. Durante el shabat, lo único que se hace es rezar, estudiar, descansar y estar en compañía de la familia. Durante ese día y durante las fiestas, se recita en las sinagogas un servicio religioso adicional, el musaf, que se corresponde con el sacrificio que se ofrecía en el Templo en dichas ocasiones.

ORACIÓN JUDIA




Por tradición, los judíos rezan tres veces al día: por la mañana (shaharit), por la tarde (minjá) y al anochecer (maariv). Se cree que estos tres momentos de oración corresponden a los tiempos en que los sacrificios se ofrecían en el templo de Jerusalén. Tanto así, como de otras maneras, el judaísmo rabínico aún conserva la estructura del ya abandonado culto en el templo. Las congregaciones mínimas (minyán) para rezar están formadas por grupos de diez hombres

RABINO


Rabino (del hebreo Rabí, 'mi maestro'), título honorario de los maestros judíos de la Ley. El título se empezó a aplicar tras las disputas entre las escuelas del rabino y escriba judío Shammai y el también rabino y profesor judío Hil.lel. Se utilizaba ya en la época de Jesucristo, al que sus discípulos se dirigían en este término. El título se sigue manteniendo, aunque no de forma estricta, como denominación oficial de los ministros judíos.
El rabino era, al mismo tiempo, estudiante, intérprete y profesor de la Torá, y para preparar a los hombres para asumir este variado papel, se fundaron grandes yeshivas (academias) en épocas remotas en Palestina, en Yavné y Tiberias (en la actualidad pertenecen ambas a Israel), así como en Sura, Nehardea y Pumbedita, en Babilonia. Estas academias rabínicas existieron en todos los países de la diáspora hasta épocas modernas.
Hoy en día, la mayoría de los rabinos son más predicadores y pastores que autoridades civiles. Aunque las academias de estilo antiguo siguen existiendo, después de ella han surgido nuevas instituciones, como los seminarios rabínicos.
Desde un punto de vista tradicional, sólo los varones podían convertirse en rabinos. Sin embargo, en décadas recientes, los seminarios reformistas, tanto conservadores como reconstruccionistas, han empezado a ordenar a un gran número de mujeres.

MOISES


Moisés es la figura central del judaísmo rabínico como fundador y legislador y como el primero y más grande de los profetas. De acuerdo con los rabinos, todo el Pentateuco fue dictado por Dios a
Moisés, «nuestro maestro», quien lo puso por escrito. Existe en la literatura rabínica una tensión entre el maestro a quien Dios se dirigió «cara a cara» y el temor a adscribir cualquier divinización a Moisés. Se le describe como un rey o el máximo estadista, cuya sabiduría es la máxima posible: «en el mundo fueron creados cincuenta niveles de sabiduría y todas menos una le fueron concedidas a Moisés» (Zohar). Su carácter profético es superior al del resto de profetas: «el resto de profetas vio a través de un espejo empañado, pero Moisés vio a través de un espejo bruñido» (Levítico Rabbah 1,14). Según la interpretación del Talmud recibió también la ley oral, además de la Torá o ley escrita. Esta ley oral fue consignada posteriormente (s.II a.C.-II d.C) por escrito en la Mishná, la Tosefta y los Baraitot.

LA TORÁ


Los judíos hablaban de la Torá: leyes que Dios reveló a Israel, y en las que se ofrecía una visión del mundo y una manera de vivir (la Halajá), la senda que se debía seguir por el mundo: las leyes, costumbres y prácticas judías.

HACH


La quinta obligación del musulmán es el hach, la peregrinación a la Kaaba, en La Meca. Todo musulmán adulto, capacitado físicamente y dotado de bienes suficientes debe realizar esta peregrinación por lo menos una vez en su vida. Celebrado durante los primeros 10 días del último mes del año lunar, el rito exige que los peregrinos se encuentren en un estado de absoluta pureza. Los elementos principales de este prolongado rito son dar siete vueltas a la Kaaba, correr por siete veces a paso ligero entre los dos túmulos próximos al santuario, separados entre sí unos 400 metros. Con ello se completa la denominada “peregrinación mayor”. La “peregrinación menor” incluye la visita a los lugares próximos de Mina y Arafat, y la realización de diversos ritos como la lapidación con siete piedrecillas de tres puntos que evocan las tres veces que Abraham fue tentado por el demonio.

SAUM


La cuarta obligación es el ayuno, o saum, durante el mes del Ramadán. Puesto que el calendario islámico es lunar, las festividades no son fijas. Incluso durante los cálidos veranos la mayoría de los musulmanes observa con rigor el ayuno. Durante el mes de ayuno las personas deben abstenerse de comer, beber, fumar y mantener relaciones sexuales desde el amanecer hasta la puesta del sol, y evitar todo pensamiento o acto pecaminosos. Quienes puedan permitírselo deben, además, dar de comer como mínimo a un pobre. Si una persona no puede cumplirlo por encontrarse enferma o de viaje, no es necesario que ayune en ese momento, aunque deberá hacerlo en días posteriores.

ZAKAT


La tercera obligación fundamental de un musulmán es pagar la denominada zakat o limosna (Corán 2, 263/64 a 275/74). Éste fue en un principio el impuesto exigido por Mahoma (y después por los estados musulmanes) a los miembros acomodados de la comunidad, sobre todo para ayudar a los pobres. También se utilizó para captar conversos al islam, así como para la redención de cautivos de guerra, para el auxilio de personas con grandes deudas, para la financiación del yihad (la guerra por la causa del islam o guerra santa), que según los comentaristas del Corán engloba el bienestar y la educación. Sólo cuando se ha entregado la zakat se considera legítima y purificada el resto de la propiedad y fortuna de un musulmán. En la mayoría de los estados musulmanes la zakat ya no es recaudada por el gobierno y se ha convertido en una limosna voluntaria, aunque su pago sigue siendo considerado como una obligación esencial de todos los musulmanes.

EL SALAT


ORACION
La segunda obligación es la salat, que consiste en realizar cinco oraciones diarias. La primera oración tiene lugar antes de la salida del sol; la segunda, al mediodía; la tercera, entre las tres y las cinco de la tarde; la cuarta después de la puesta del sol y la quinta antes de acostarse y antes de la medianoche. Durante la oración, los musulmanes miran en dirección a la Kaaba, una pequeña estructura de forma cúbica situada en el haram o 'lugar inviolado' de la Gran Mezquita de La Meca. Para orar hay que permanecer al comienzo de pie, acto seguido hacer una genuflexión a la que suceden dos postraciones, y, por último, ha de tomarse asiento. En cada una de esta posiciones se recitan determinadas oraciones y fragmentos del Corán.
Como paso previo al inicio de la oración, el devoto tiene que hacer las abluciones pertinentes. Antes de cada oración comunitaria, el almuédano (del árabe al-mu'addin, 'el que llama a oración') o muezín hace una llamada pública desde un minarete (o alminar) de la mezquita. En tiempos recientes, la llamada se hace a través de sistemas de megafonía para que se pueda oír a distancia.
El viernes es el día santo para el islam. En dicho día, a primera hora de la tarde, se realizan en las mezquitas oraciones especiales de carácter comunitario. Son precedidas por un sermón desde el púlpito pronunciado por el imán, llamado también el jatib. En los dos días de fiesta religiosa anual, llamados ids (uno de ellos tan pronto concluye el mes de ayuno del Ramadán y el otro después de la peregrinación a La Meca), se celebran por la mañana oraciones especiales seguidas de sermones.

LA POFESIÓN DE FE JUDIA


Profesión de fe
De acuerdo con el absoluto compromiso del islam con el monoteísmo, la primera obligación es la profesión de fe o testimonio (shahada): “No hay más dios que Alá y Mahoma es su profeta”. Esta profesión, que debe ser hecha pública por cada musulmán al menos una vez en su vida “de forma verbal y con total asentimiento de corazón”, señala el ingreso de un individuo en la comunidad islámica.

CHIITAS


Los chiitas son el único grupo disidente de importancia con respecto a la ortodoxia suní que sobrevive en el islam. Surgieron a consecuencia de una turbulenta disputa familiar sobre la sucesión política de Mahoma a la muerte de Alí. Los chiitas afirmaban que gobernar a la comunidad es un derecho divino de los descendientes del Profeta a través de su hija Fátima y su marido Alí, quien inaugurara el periodo denominado de los “cuatro califas justos” (658-750). Dentro del grupo de los chiitas hay quienes creen en una serie de 12 caudillos religiosos infalibles que arranca con el imán Alí, por lo que a este grupo también se le conoce como duodecimanos. El duodécimo y último imán desapareció en el año 873, y los chiitas esperan que a su regreso el mundo se vea presidido por la justicia; teniendo en cuenta que proclamaban la infalibilidad absoluta de los jefes de la comunidad, éstos debían ejercerla con autoridad. El imán —de carácter semidivino— es, por su propia condición, el único designado por la luz divina “para explicar la ley de Dios”. Hasta ese momento, incluso el mejor gobernante no tendrá la legitimidad absoluta. Además de los duodecimanos, otros grupos chiitas han sido los zaydíes, los ismailíes o los nusayríes.

DIOS ALÁ


El monoteísmo es una cuestión central para el islam, que admite la existencia de un solo Dios (llamado Alá), único y omnipotente. Rechaza el politeísmo, así como la extensión de la divinidad de Alá a alguna persona. Dios creó el hombre y la naturaleza a través de un primordial acto de misericordia, de lo contrario existiría la nada. Además, dotó a cada elemento de su creación de su propia naturaleza y de leyes que gobiernan su conducta . El resultado es un conjunto armónico y ordenado, un cosmos en el que cada cosa tiene su propio lugar y sus limitaciones, por lo que en la naturaleza no aparecen desequilibrios, trastornos o rupturas. Dios preside y gobierna el Universo, que con su ordenado funcionamiento es el signo y la prueba principal de la existencia de Dios y de su unidad. En el pasado pudo haber alteraciones del orden natural, en forma de milagros, pero aunque el Corán acepta los milagros de los profetas anteriores (Noé, Abraham, Moisés, Jesucristo y otros), los declara caducos; el milagro de Mahoma es el Corán, prodigio que ningún humano puede realizar o repetir

LA SUNNA


La segunda fuente esencial del islam, la Sunna o ejemplo del Profeta, es conocida a través del Hadit, la recopilación de tradiciones basadas en los hechos y dichos del Profeta. A diferencia del Corán, que fue memorizado por muchos seguidores de Mahoma y que fue compilado en forma escrita muy pronto, la transmisión del Hadit fue en gran parte oral y las actuales colecciones autorizadas datan del siglo IX.
A diferencia del Corán, el Hadit no es considerado infalible. En el periodo islámico primitivo la infalibilidad del Profeta (aparte de las revelaciones del Corán) constituyó un punto de controversia. Pero más tarde el consenso de la comunidad islámica fue que tanto él como los profetas anteriores fueron infalibles. Debido a que el Hadit fue transmitido de forma oral, se admitió que la intervención humana pudo introducir errores durante dicho proceso, por lo que es una fuente secundaria respecto al Corán. Según algunas investigaciones no musulmanes, una gran parte del Hadit no procede en sí del ejemplo del Profeta, sino que recoge las opiniones de las primeras generaciones de musulmanes, opiniones que fueron después atribuidas a Mahoma. En determinados casos se habrían conservado sus declaraciones genuinas, aunque después se añadieran opiniones teológicas o legales expuestas por musulmanes.